CUÉNTAME...

Hoy te escucho corazón...

Vives, lates.

Nunca callas...

Y me agobias, y mareas,

y me tapo los oidos

pero siempre, aunque disimule, pervive tu sonido.

Estas ansiono, emocionado, lleno de sueños y anhelos, no me dejas ni dormir.

Se que lo haces por mi y porque rebosas vida. No podrías hacerlo si te dejara morir...

Y me siento, y te escucho de nuevo.

Y ya anulé mis miedos, y feliz, te alegraste.

Y aumenté mis sueños, y radiante, me animaste.

Y en ocasiones te lleno de ese miedo que aún me queda...

El miedo a sufrir.

Y entonces me hablas, me aconsejas

y me dices que el miedo a sufrir es casi peor que el sufrimiento

y que jamás sufriras si es por conseguir mis sueños,

porque cada momento de búsqueda es ya un gran momento,

y un pequeño sueño logrado.

Y que sangras sin mis sueños..

Jamás se puede encontrar si no se tiene valor para buscar lo soñado.

Aprétame fuerte el pecho cuando apenas te haga caso

y así me recuerdes siempre, que eres mi gran tesoro, mi valioso aliado

que estas muy vivo y que te escuche,...

que te escuche a cada instante,

para así, seguir soñando...